Pictor Mulier

Diosas de la danza de Pictor Mulier

Pintar a una bailarina es pintar a una Diosa.

Un ser capaz de conmover el alma con cada movimiento, con cada gesto de su cuerpo desnudo.

Estas mujeres poseen cuerpos perfectos, forjados en la disciplina y la entrega absoluta a la danza.

Pero el erotismo que emana de ellas no proviene solo de su belleza formal: surge de su fuerza, de su flexibilidad, de la manera en que se funden con la música y se transforman en criaturas sobrenaturales en cuanto comienzan a danzar.

Y lo que más me conmueve como pintor es tener el privilegio de pintar a otra artista.
De convertir su arte en el mío.
De elevar su danza a la eternidad de la pintura.

40x60 cm

Atrévete y libera a tu musa interior.
Encarga tu propio retrato erótico.

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